De las puertas giratorias a la puerta de casa: un «Superegulador» muy familiar

El sector eléctrico español no funciona. Mientras que los españoles pagamos el precio de la energía más caro de Europa (si tenemos en cuenta el déficit de tarifa), las eléctricas españolas doblan en beneficios a sus homólogas de otros países europeos. Gran parte de la culpa de esta situación la tiene el regulador, es decir, el Gobierno, que lejos de subsanar las deficiencias del mercado eléctrico, cada vez añade nuevos problemas (recorte de las primas, incremento del término de potencia, peaje al autoconsumo).

Hasta ahora, el principal problema eran las puertas giratorias, que hacen que políticos reciban un alto cargo en una eléctrica nada más dejar su puesto público, como pago por los favores realizados. Sirvan como ejemplo Felipe González, José María Aznar, Josu Jon Imaz, Ángel Acebes o Pedro Solbes.

Ahora hemos ido un paso más allá. Hace unos meses el Gobierno anunció la supresión de diversos órganos independientes, que han criticado muchas de las normas del sector eléctrico, como la Comisión Nacional de la Energía y la Comisión Nacional de la Competencia, para unirlos bajo un solo órgano, conocido como Comisión de los Mercados y la Competencia. La versión oficial dice que el cambio obedece a la política de austeridad del Gobierno, pero la realidad es que lo que se busca es un menor control de la actividad del Gobierno, mediante un Consejo menos especializado y más colapsado. Como era de esperar, este cambio no ha gustado nada a la Comisión Europea, que da mucha importancia a los órganos independientes. 

No contentos con este cambio arbitrario y probablemente contrario al Derecho Europeo, el Gobierno del PP ha continuado en este ámbito con su política de "puerta de casa", es decir, colocar a familiares del Gobierno en puestos clave. Esta práctica es la que se ha usado para el nombramiento de cargos en el nuevo "Superregulador". Así, Beatriz de Guindos, sobrina del Ministro de Economía, ha sido nombrada Directora General de Competencia, y Micaela Arias, hija del Ministro de Agricultura y Medio Ambiente, será Subdirectora de Industria y Energía. Hay que recordar además que el hermano de Cañete fue Director de Energía Nuclear en Endesa hasta el año pasado, que el hermano de De Guindos es concejal del PP en el Ayuntamiento de Madrid y que otra sobrina del Ministro, Leticia, ha sido colocada en el Ministerio de Agricultura.

De todas formas, colocar a familiares en altos cargos es una práctica generalizada del Gobierno del PP, que encontramos en casos como el del hijo de Esperanza Aguirre, que es "asesor" de la Secretaría de Estado de Comercio, el de la mujer de Álvaro Nadal, que es presidenta de la Comisión de Propiedad Intelectual y de Acción Cultural Española, el cuñado de Cañete, presidente de la Sociedad Estatal de Caución Agraria, la esposa de Rodrigo Rato, directora de Paradores Nacionales, la mujer del Presidente de Renfe, que es directora de Puertos del Estado, la pareja de Alberto Núñez Feijóo, como Jefa de Prensa del Secretario de Estado de Presupuestos o la hija de Eduardo Zaplana, asesora en la Secretaría de Estado de Turismo. Puede consultarse la interminable lista de nepotismo del PP aquí.

En definitiva, las cosas se están poniendo cada vez más difíciles. En el próximo recorte a las renovables ya no habrá informes independientes de la CNE o la CNC en que apoyar los recursos. A partir de ahora, todo queda en familia...

Actualización: las últimas noticias apuntan a que el bochorno por el dedazo ha sido tal que la sobrina de De Guindos habría presentado su dimisión